Es mi deseo animarles a todos los empresarios y emprendedores en general para esta difícil época que nos toca vivir, recordarles que las personas que subsistirán al frente de empresas, no serán los más fuertes ni los más inteligentes sino aquellos quienes más rápido se adaptan al cambio; aceptar la realidad que nos toca vivir, hoy en día es la tecnología, no sabemos lo que nos espera en el futuro.
En el ceremonial como en nuestra vida diaria los símbolos revisten una principal relevancia, tanto que podemos decir que existe todo un sistema simbólico. Entre el sistema receptor y el emisor hallamos un eslabón intermedio; el sistema simbólico, que transforma su visión y ofrece una dimensión de la realidad mucho más amplia. Es un vínculo, el universo físico se complemente con el universo simbólico.
El ceremonial de empresa es la expresión simbólica de su sistema. Mediante los actos ceremoniales darán origen a su propio espacio donde expresará su centro que serán sus directivos. Su casa matriz será el ámbito generador de hechos y actos institucionales, que creará su tiempo particular con independencia del tiempo histórico común (inicio de actividades, horarios, cortes, récords históricos, balances, reuniones, historia de la empresa, etc.).
La suma de interrelación de los símbolos así como la eficiencia, la tradición, el empuje, la modernidad, la preocupación por la comunidad y el trabajo, constituye la identidad empresarial.
El protocolo como un medio difusor de la imagen, viene a complementar todo el sistema global de la comunicación de la empresa.
Por Julia Redick.
Directora Gral. PIPEPC