Desde aquellos días de marzo en que registraba nuestro país su primer caso de corona virus, todo ha cambiado, aunque Paraguay es un país mediterráneo, la globalización y el tráfico de información nos mostraban a naciones enteras vulneradas por este mal.
Fueron momentos de mucha incertidumbre a nivel global y que, de hecho, aunque no lo estemos aun superando, aquí, a nivel local lo estamos llevando con relativa tranquilidad y hasta si se quiere decir con cierto relajo. Hemos encontrado modos de estar conectados a través de la tecnología y las innumerables plataformas que han sido más que herramientas, fundamentales aliadas para los profesionales que estamos trabajando, estudiando, enseñando o perfeccionando habilidades y capacidades.
En estos tiempos encontramos aplicaciones populares como ZOOM, GO TO MEETING, MEET, por citar algunos, las cuales nos han ayudado a mantener ciertos lazos sociales y para fines educativos. El teletrabajo, teleclases o home office se ha convertido en algo normal si se quiera así decir, pero sea cual sea el rol que nos quepa cumplir, no debemos descuidar la imagen, cómo nos ven significa muchísimo en importancia, ya sea para mejorar tu perfil profesional o para construirlo.
Por eso es fundamental invertir de manera inteligente en la formación, especialización, vestimenta y maquillaje en el caso de las mujeres. Es igualmente importante tener en cuenta el entrenamiento frecuente de la dicción y sobretodo la vocalización correcta, demás no está la coherencia entre la comunicación verbal y la paralingüística, que no suceda la discordancia entre el emisor, el mensaje, el código y el receptor. Elegir una locación con buena iluminación, sea natural o artificial, bien aireada y sobre todo con los cuidados al máximo, por que las conversaciones, conferencias o clases pueden grabarse y ante el menor descuido, volverse virales
Para ponernos en claro, la paralingüística engloba todo cuanto corresponde a la contextualización del mensaje y la interpretación del mismo teniendo en cuenta los gestos (sean con las manos o faciales), tonos de voz, entre otros.
Ya no se trata solo de una cuestión de cuidados sanitarios, ya es la puerta de entrada a un nuevo estilo de vida que pone de manifiesto la dependencia de la tecnología, así como el uso de los barbijos.